Esta semana hemos disfrutado de nuestro maravilloso entorno con la compañía del viento, un compañero habitual en las jornadas del otoño.
El lunes fue muy divertido porque el viento era tan fuerte que nos voló alguna que otra mochila durante el desayuno. También por fin encontramos diferentes setas en el campo de los eucaliptos. Esta zona de la finca nos encanta porque nos sentimos enanitos rodeados de los inmensos eucaliptos y huele siempre fenomenal.
El martes en psicomotricidad nuestro material fundamental de la clase fue el aro, nos dio la oportunidad de saltar, de hacer equilibrios, de girar, de hacer lanzamientos...etc. También jugamos a "la zapatilla por detrás", "Gatos y ratones " y " la Bomba".
El miércoles, el proyecto nos llevo a conocer el cuerpo de los delfines y hacer una ficha que requirió mucho esfuerzo y concentración para poder escribir todas las partes. Desayunamos en la finca y visitamos de nuevo los castaños y no pudimos evitar abrir algunos erizos y coger unas castañas.
Cristina nos leyó un cuento precioso sobre las burbujas y las piedras que podemos cargar en nuestra mochila imaginaria en función de si nuestras acciones son positivas y negativas. Nosotros llegamos a la conclusión que queríamos muchaaaaasss burbujas como podréis ver en las fotos.
El jueves descubrimos algunos habitantes como los bichos bolas que residen en los troncos de los árboles, saltamos el riachuelo y paseamos por la finca, siempre descubriendo algún rincón interesante.
El viernes jugamos de nuevo en la zona de los eucaliptos y desayunando bajo uno de ellos de vez en cuando caían algunos de sus frutos, por supuesto recogimos unas cuantas capsulas y las llevamos a clase y a casa en nuestras mochilas. También estuvimos recogiendo las grandes cortezas de sus troncos que estaban en el suelo para construir una guarida, fue un bonito trabajo de equipo en el que todos colaboramos. Al mismo tiempo estuvimos comparando cortezas y viendo cuales eran más largas o más cortas.
El viento nos ha proporcionado la oportunidad de conocer otro árbol maravilloso, el magnolio, Aia y Fátima encontraron sus frutos en el suelo y les resultaron muy curiosos, esto nos llevó a fijarnos en los dos árboles que tenemos y en sus brillantes hojas.
Por supuesto ésta semana, hemos jugado en los rincones de clase, hemos hecho una actividad de lógica-matemática, hemos comenzado cada uno de los días cantando y realizando las rutinas y hemos escuchado música.